Los Baúles Rurales, -cajones mágicos llenos de libros- circulan por Crespo y su zona de influencia desde hace siete años. “Pasaron por numerosas instituciones, además de hacer paradas en escuelas, que son las que más los solicitan”, confirmó a AIMCampo una de las protagonistas de la iniciativa, Carina Senger. La Agrícola Regional (LAR) Cooperativa Limitada adaptó la idea al medio rural y lleva adelante el proyecto desde 2004.
En diálogo con esta Agencia, Senger precisó que Baúles Rurales es un proyecto que se realizó en base a Baúles Andariegos, perteneciente al área de extensión de la Universidad Nacional de Entre Ríos. “El contenido de los baúles es un aporte de LAR más donaciones de Idelcoop, del Inta y de las Editoriales de Entre Ríos y de Uner. Nosotros en LAR reformulamos el proyecto inicial, tomando como base el de Andariegos”.
Los baúles están identificados con tres de los colores del Arco Iris: naranja, verde y azul. “Cada baúl contiene 100 libros que se prestan a chicos y grandes; material de diversos temas: biografías, cooperativismo, cocina, historia, humor, informática, literatura, salud, medio ambiente, manualidades, novelas recreativas; un libro viajero; y un cuaderno de registro. Ahora queremos anexarle las revistas que llegan a LAR, que contienen temas de interés para los productores”, destacó Senger.
La joven explicó que la experiencia es maravillosa: “toda la comunidad recibe los baúles con entusiasmo e interés, lo que de por sí es muy gratificante. Además, contamos con el apoyo de los padres, ya que al traslado de una escuela a otra lo realizan ellos mismos”. En los establecimientos escolares donde llegan los Baúles, “se preparan como para una fiesta. Cada escuela los tiene durante 15 días, los chicos se llevan los libros a la casa y en el cuaderno de viaje se asienta quien se los llevó y cuando lo devuelven. Es decir, funciona como una biblioteca, pero circular”.
En un principio, quienes se encargaban del proyecto eran cinco personas, pero ahora son sólo dos: “lo cierto es que el esfuerzo vale. Nada más hermoso que observar como se entusiasman los chicos, ya que a mayoría no tiene posibilidades de concurrir a una biblioteca. Por eso, para ellos es una novedad porque sale del marco institucional de decir ‘nos sentamos a estudiar’. Es más didáctico, y los ayuda a pasar el rato y distraerse, que es la idea”.
El trayecto
La joven cooperativista detalló que cuando llevan los Baúles a una escuela, “les damos el camino que deben seguir, es decir, hasta cuando quedarán allí, y la fecha en que deben trasladarse a otro lugar. El traspaso de un establecimiento a otro lo realizan los papás, lo que demuestra que la comunidad se involucra y eso es muy positivo”, manifestó.
La idea, dijo Senger, es “promover la imaginación, que los chicos puedan producir sus historias y tener espacios para la recreación”.
Fuente: AIMC - 18/8/12 - ( http://www.aimdigital.com.ar/aim/2012/08/18/baules-rurales-cajones-magicos-llenos-de-libros/ )